Discurso de Gerardo Ruiz

En la página Web del COLEF esta colgado el discurso de Gerardo. LLeva su tiempo leerlo, pero creo que merece la pena. Y un fuerte abrazo para todos los que utilizais este foro, por el impacto y la repercusión que están suponiendo vuestras aportaciones y opiniones para nuestra profesión.
J. A.

Con tu permiso José Antonio, y con el de Gerardo, expongo aquí el discurso que está en la Web del COLEF:


DISCURSO ESPECTACULAR DE GERARDO RUIZ

REALMENTE MERECE LA PENA:





"Discurso
1er Premio COLEF


Avilés 26 de noviembre de 2010
Por José Gerardo Ruiz Alonso

1º-Primero saludar a todos los presentes, Autoridades, decano del colegio Sr. Chamorro, a su junta directiva y a todas/os las compañeras y compañeros que estais aquí.

2º-En segundo lugar dar las gracias, por un lado al jurado de los premios colef en su 1º edición por haberme otorgado este galardón que me llena de orgullo y que hago extensivo a todos/as las colegas que compartis la emocionante, humana y bella profesión de enseñar mediante el movimiento corporal y las actividades físico-deportivas.
Y por otro, agradecer a todos los avalistas de mi candidatura, pues lo hicieron guiados por la amistad y el corazón, en especial al gran empeño que puso Martina Reguero.
Felicitar a al Asociación Amigos del Deporte de Langreo y a D. Luis León su presidente, por haber sido galardonados con el premio Colef en la categoría de colectivos.
También felicitar a los demás compañeros nominados, porque seguro tienen tantos o más méritos que yo para ser premiados, y además son amigos y amigas Conchita, Cecchini, Feito, Juan Luis, y Fernando.

3º-No quisiera extenderme demasiado, pero la ocasión es única y bien lo merece, porque parte de mi historia personal coincidirá con la vuestra en la mayoría de los casos, así que pido disculpas de antemano porque me voy a alargar un poco y espero no aburriros.

Ahora sintetizando mucho os contaré un poco mi humilde historia en el mundillo de la EF y el deporte <> de mi vida. Y comenzaré recordando con mucho cariño a mi primer profesor de EF en el Instituto de la Calzada, hoy Padre Feijoo, de mi barrio, a D. Luis Bericua Huerta (qepd) cuando un jóven que había practicado el rugby con pañuelín, y dejado el futbol porque no era muy bueno y no tenía futuro en ello, y ya me estaba convirtiendo en una rata de gimnasio –tras machacarme en casa con los cursos por correspondencia de Sansón Institut e Instituto Inter-, le dije un buen día profe voy a presentarme al INEF de Madrid, que era el único que había entonces, y el bueno de Bericua me respondió tan llanu y directu como siempre “Mus –abreviatura de músculos como me llamaba el en el insti- no vas a entrar, eso del INEF ye pa internacionales”, me quedé un poco planchau, pero por esa domina ya andaba yo endureciendo mi carácter y personalidad a base de levantar fierru y de luchar a lo grecorromano en el gimnasio Club Atlético Gijonés de Educación y Descanso en los Campos Elíseos de Gijón, y por ello no me desanimé ni desistí del empeño. Seguí entrenando para poder ingresar y emular a mi buen amigo Luis Armando Menéndez “Armandón o el Pilín” como lu conocien en el INEF, esi si era internacional de Rugby y plusmarquista asturiano de natación y había entrado 2 cursos antes que yo.
También para poder dedicarme al chandall y encauzar mi vida hacia la EF tuve que superar otro escollo, decirle a mi padre que quería estudiar EF (los que estudiaben entonces era para médicos, abogados, ingenieros, etc.), y como casi todos allá por los 70, mi padre me respondió bueno si quies estudiar eso de la gimnasia en la UNICEF no se que tal podrás vivir de ello, pero adelante. He de decir que mi padre era ferroviariu de RENFE y que como todos los padres tenía sus planes para su únicu fíu, que eran que fuese hacer la mili por RENFE y luego me quedase en la misma estudiando una ingeniería o me preparase para factor de estación, interventor o maquinista. Y sin duda gustávenme mucho los trenes, pues viajaba desde muy niño de continuo en ellos gratis por toda España, y todos los 6 de enero desde muy pequeñín hechábenme los reyes un tren, cada añu especializau en algo, un tren de fumo como decía yo de guaje, al otru un tren de mercancías, al siguiente un TALGO, etc. Eso sí tengo que agradecerle a mi padre, que sólo me aconsejase, pues luego me dejó decidir y hacer lo que yo quería, apoyándome en todo.

Ahora me voy a situar en 1975, acabé el COU y en mi cartilla de escolaridad ponía algo que sonaba un poco raro, “consejo de orientación: educación física” (ni hasta en el instituto sabían muy bien que era aquella orientación, pues en aquel momento sólo 1 alumno de la Calzada, el tal Armandón había entrado en el INEF). Pues bien, tenía la duda de Berícua y el beneplácito de mi padre, y estaba entrenando con el Sporting juvenil en los campos de la Fontanía a las órdenes del profe de EF Manolo Llanos –aún no existía Mareo-, y también en los gimnasios del Grupo y en la pista de atletismo de la Laboral, iba a una academia a profundizar el francés, y en casa hacía tantos test psicotécnicos como me daba la cabeza, a la vez que leía y subrayaba los artículos de la revista “deporte 2000” y los libros del que luego sería mi maestro José Mª Cagigal, porque sabía que en la prueba de entrada de madurez intelectual caería un tema del gran filósofo y director del INEF, y cayó, decía Cagigal en el Auditorium repleto de aspirantes. “el título del tema a desarrollar será ”, y yo me alegraba interiormente de haberlo reeleido en el libro “deporte pulso de nuestro tiempo”. Y llegó el día y pa Madrid, y en tren, a la vieja estación del Norte Príncipe Pío, cogí el autobús 42 y a examinarme de las pruebas de ingreso en INEF. Y más tarde llegó la carta de mi aceptación, en la que Cagigal nos advertía antes de ingresar que nos lo pensáramos bien pues además de ser una carrera de estudios deportivos, era eminentemente pedagógica, y que no nos lleváramos a engaño. Hasta ese momento de mi vida, fue esta carta, la noticia más emocionante y más esperada; la abrí temblando y cuando vi que era apto, me sentí el rey del mundo, mi autoestima creció hasta el infinito, era el joven más feliz de la tierra, no en vano en aquel INEF que ingresaban 60 estudiantes cada año yo había sido uno de los elegidos. Corrí como un poseso a enseñarle la carta a mis padres, amigos y por supuesto a mi profe de gimnasia, al bueno de Bericua, el cual también se alegró mucho.

Y así empezó una vida nueva para mi, la vocacional por la EF y el deporte, hasta llegar a profesional. De un jóven deportista de barrio, de provincias, de una familia trabajadora, con un chandall y zapatillas sin marca, pasé a la capital de España, y tuve mi primer Adidas con capucha y un flamante escudo de INEF que lucía con orgullo en el pecho, por entonces con cierta hipertrofia.

En el INEF pasé los mejores años de mi juventud, partiendo de la base que estudiar fuera ya de te daba un plus de independencia, socialización, vivencias y experiencias formativas como persona y como estudiante. Allí me empezaron a llamar como a Villa “el güaje” por mi forma de hablar en asturiano, ya que a todos les sonaba peculiar. Estar haciendo lo que me gustaba ya era lo máximo, y a la vez conocer y compartir ideas y vivencias con mucha gente interesante, hacer amigos y amigas en la carrera, aprender lecciones magistrales de profesores increíbles, compartir espacios de entrenamiento con grandes deportistas y entrenadores, etc. fue el ambiente fenomenal que soñé y luego viví en aquellos intensos cuatro años. Amigos, profes, etc. que quedaron en mi retina, en mi mente y en mi corazón para siempre. Recuerdo con nostalgia y cariño las lecciones magistrales de anatomía del Dr. Anítua Solano decano de la facultad de medicina de Salamanca, que dibujaba a dos manos un atlas anatómico en la pizarra y simultáneamente explicaba el origen y la inserción del latissimus dorsi, tensor de la fascia lata, la pata de ganso, los movimientos de la articulación coxo-femoral o la circunvolución de rolando; la fisiología de la contracción muscular con los puentes de actina y miosina del Dr. Alvaro Gracia de la Complutense; la teoría y práctica del entrenamiento con el fartlek, la carrera alegre de los polacos, la pliometria o el microciclo con Alvarez del Villar; el mismo que en atletismo nos enseñaba el fosbury flop, la técnica de zancada y los lanzamientos; las preciosas sesiones sobre Piaget, Thorndike, Skinner, Paulov, Gesell y Freud en la psico-pedagogía con el gran Cagigal; las taxonomías y el aprendizaje motor de Welford y Marteniuk y los métodos de enseñanza en la didáctica con Bañuelos y Noguera, la S de Counsilman en natación con Fernando Navarro, les mañes y el randori en el Judo con mi querido maestro Toshiyasu Uzawa, que llamábamos el chino y al que yo vacilaba de fuerza mostrándole el bíceps y el respondía “hey Gerardo ser como gorila asturiano muy fuerte de física pero débil de mental” y se reía, o “Gerardo ser como botella muy fuerte de cuerpo pero débil de cabeza, jajaja”; y que nos exponía su filosofía oriental del camino flexible (lo que significa judo), haciendo paradigmas como , ; Los ejes, planos, monos y nomenclatura de gimnástica con Hernández Vázquez; la biomecánica con el Dr. Sicilia y sus famosos trabajos de fotogramas, balances musculares, aceleraciones y velocidades lineales y angulares etc; el balonmano de chop, chop pase y armado clásico con el duro de Juan de Dios; el basquet con el elegante Lolo Saenz y el pequeño Peiró; el fútbol con el bueno de Santisteban que explicaba el regate y lo ejemplificaba el gran Amancio; el saque flotante, el toque dedos y de mano baja con el voleibolista Callejón; la gimnasia artística con las palomas de cabeza, el flic-flac, la rondada y el yamashita con Bacher y Mariano; las actividades en la naturaleza del chulín y guapin de Barea con sus campamentos y semana blanca; la deshinibición corporal y la expresión con Luciano Sarmiento; el deporte, los medios de comunicación, la política, y las campanas de gaus en la sociología del Dr. Lecumberri, la educación por el movimiento, le boulch, la psicomotricidad, el espacio, el tiempo y la lateralidad con el Dr. Legido; el paidotribo, el pancracio, milon de crotona, el olimpo, la palestra, la pelota de los incas y el calço con la historiadora MªTeresa; el cooper, rufier dikinson, la cineantropometria y la valoración de la condición biológica en Biotipología con el Dr. Meroño; le touche con el maestro de esgrima Martin krongul y sus carreras de orientación por la casa de campo; las riquísimas traducciones de artículos y libros sobre el entrenamiento de las escuelas rusa, alemana, polaca, y americana que nos hacia Tylko, tituladas “novedades en entrenamiento”, etc, etc. fueron lecciones que pronto engrosaron mi vocación por la EF y el deporte, que primero estudiaba para aprobar –como todos- y luego se convirtieron en formación y conocimientos que agrandaron mi acerbo cultural sobre la materia, y me sirvieron más durante la práctica real ya en las clases del instituto, en el campo o el gimnasio con deportistas.


Luego nos toco enfrentarnos a la vida real, pista descubierta, agua y frío, diminutos gimnasios con equipamientos trasnochados, poco material, heterogeneidad de alumnado, en fin una asignatura “maría” que no merecía serlo, según los precursores de la educación integral los ilustrados Rousseau y Jovellanos, pero la realidad era así de dura y reflexionabas ¡¡ tanto estudiar para esto!!.

Pero a la vez que estudiábamos, como jóvenes intrépidos también luchábamos, la juventud se caracteriza por ser revolucionaria, eran tiempos de cambio, murió el caudillo, y los estudiantes de EF no estaban para rollos políticos, la gimnasia y los deportes habían sido un vehículo de propaganda de la dictadura durante 40 años, ya estaba bien, queríamos una facultad, una titulación y una asignatura que prestigiase nuestra profesión ante la sociedad, y todos a una las tres escuelas, la Almudena, la Academia José Antonio y el INEF, unidos fuimos a la revolución, tomamos la calle de Alcalá para gritarle al ministerio de educación, con pancartas, camisetas serigrafiadas con <>, chandalls, y material deportivo, hicimos de todo, desde huelgas de hambre, pintadas en la universitaria, competiciones, saltos en parapentes con pancartas, concentraciones, escritos, programas de radio, etc. estábamos dispuestos a aupar la EF donde se merecía, y al final después de muchas vicisitudes lo conseguimos. Y se crearon las facultades que expedían el titulo de licenciado, pero no todo acabó ahí.


En tercer curso me ocurrió un hecho que también cambiaría y condicionaría mi vida en el futuro, conocí una estudiante de la Almudena, que con los cambios ya estaba en el INEF, una catalana que estudiaba EF como yo, nos enamoramos y fuimos novios, y dos años después de acabar la carrera, seguíamos juntos, pero separados por la distancia geográfica; entonces hablamos de casarnos y de donde vivir, Tere me hacía muchas propuestas (ella decía Tarragona y yo respondía no, ye que ahí hablais muy raro; tere decía Madrid, y yo no que ye una mole de cemento, ella decía Zaragoza y yo no que no tien playa, etc.) además yo le insistía en que si íbamos entre los 4 puntos cardinales de Gijón y el puerto Pajares, la ría del Eo y la de Tina mayor ya nos podíamos dar por casados. Y ella una chica decidida, viajera, aventurera, y atrevida dijo que si, hizo las maletas y dejó atrás su tierra y sus seres queridos, su lengua y su cultura ¿qué valentía? Y cuánto he valorado esta decisión, y aquí está en el paraíso natural desde 1981 -29 años-. Primero dio clases en Grao, en donde les vaques pasaben y dejaben les boñiques en medio del patio donde daba clase, y los guajes gritaben pasame la pelota nin. Luego en La Felguera con fíos de mineros, otru ambiente y otru acentu. Después dejó los pueblos y fue al ambiente más fino de la capital, al Aramo o femenino, y al Alfonso o masculino de Oviedo y por fin en el 85 arribó al Piles de Gijón. Aprovecho este foro público entre colegas para manifestar que parte de mi currículum se lo debo a Tere, ya que gracias a su generosidad pude dedicarme más intensamente a mi formación y desde aquí te lo agradezco, la mujer como siempre sacrificándose por el hombre. Y más tarde ocurrieron otros acontecimientos claves, los más maravillosos en mi vida, en 1983 nació nuestro primer hijo Jorge y en 1988 nació nuestra hija Marta, que a la postre, y seguramente influenciada por la vocación de los padres es actualmente estudiante de 4º curso en la facultad de FCAFD de León. Sin dudar los 3 son la savia que alimenta mi vida.

También recuerdo con especial cariño las oposiciones, la 2ª de 1986, fui a la presentación de la de Profesores Numerarios de FP en el IES Virgen de la Paloma, de Madrid, y de las bolas que salieron una me convenció, me quedé y desarrollé el tema 45 por entonces, titulado “La clase. Factores de organización, diferentes planteamientos”, y un práctico sobre “El entrenamiento de la velocidad aplicado a una clase de EF”, me acuerdo como si fuera hoy que comencé a exponer el exámen práctico de la siguiente manera: “Como decía mi profesor de anatomía el Dr. Anitua, 4 músculos mueves al andar nena, los 2 gemelos, el sóleo y el delgadito plantar•” y a partir de aquí describí la anatomía y biomecánica del tren inferior y desarrolle una propuesta de juegos, ejercicios de aplicación y asimilación para las sesiones de clase de la velocidad. Cuando salieron las notas en el tablón de anuncios del instituto, iba en primer lugar en la clasificación de mi tribunal, sólo quedaba la encerrona, y si que lo fue, llegué al tribunal como un flan, saqué la 1ª bola y el tema 11, jo “la expresión corporal y la danza”, ni idea; saco la 2ª bola y el tema 50 “actividades recreativas relacionadas con la actividad física”, menos todavía, sentí un escalofrío por la espalda, me la jugaba todo a una maldita bola, saco la 3ª bola y el tema 52, “actividades físicas en la naturaleza tipos y clasificación”, ¡vaya temita! No me lo podía creer. Quedé helado y sudaba en frío en pleno julio madrileño, tampoco me había preparado ese tema, me sabía casi todo el temario, lo juro, menos los de expresión corporal, actividades en el medio natural y el departamento, sencillamente no me gustaban y el calculo de probabilidades era a mi favor. Pensé fríamente en unos segundos cual de los tres podía preparar en un par de horas encerrado con los apuntes, pero me parecía que no tenia ni bibliografía, ni apuntes de esos temas, vaya tela, el cerebro me daba vueltas y me quede tan cuan tabula rasa, es decir con la mente en blanco. Pero al final reaccioné y le dije al presidente, siento que no sean temas para lucirse, pues tienen poco contenido científico, y que escogía las actividades en la naturaleza; entré en el aula acompañado de un miembro del tribunal como el que entra en la sala de la silla eléctrica con el verdugo, y antes de abordar el tema me puse a hacer unos minutos de relajación por el método Jacobson, ya que mis pulsaciones rondaban el umbral anaeróbico y mi cerebro procesaba cual terminal de un Macintosh del Pentágono, me decía ¡tranquilu gerardín que lo tienes a güevu!, intentando el autocontrol. Primero hice un esquema de lo que podía ser un tema, y luego me dije, salte del guión y haz algo original que no venga en los apuntes, (recurriendo a la táctica y la estrategia) y como el tribunal estaba compuesto por cinco agregados de distintas materias que ponían las notas más 5 asesores de EF, pensé tiene que haber un vocal de historia, otro de ciencias, etc. así que voy a plantearles un tema interdisciplinar. Resumiendo la exposición que hice fue, primero conceptualizar las actividades en la naturaleza, según algunos autores, luego según los elementos tierra, agua, nieve y aire, luego clasificar las actividades físico-deportivas y acabé desarrollando una ejemplificación de una salida en bicicleta desde un instituto de Gijón hasta Covadonga, planteando diversas etapas y actividades, por ejemplo cuando llegamos en la 1º etapa a Villaviciosa visitar san Xuan de Amandi y el conventín de Valdediós, entonces el profe de historia daría una clase in situ sobre el románico asturiano. Mientras el profe de ciencias les encargaría una práctica recogiendo la flora que se daba en la zona y estudiándola. Y el de geografía les enseñaría lo que es una ría y su ecosistema. La segunda etapa fue a les Arriondes, allí el profe de EF explicaría la historia y desarrollo del descenso del sella y remarían en canoa, el de geografía hablaría del propio río y de la sierra del Sueve, así como la de historia contextualizaría la romanización de Asturias y los caballos asturcones.

Yo miraba para los miembros del tribunal buscando sonrisas, gestos de aprobación, algo que me diera fuerzas y me animase a seguir, mientras pensaba aquí tien que haber algún cabrón de ciencias, de geografía o de historia, y tien que gustayos esti montaje.
La 3ª etapa era una parada en Cangas de Onís, donde el de historia explicaría la reconquista, la formación del reino asturiano y su primera capital, y los 200 años de su duración, así como su importancia en la creación de España. La 4ª parada fue Covadonga y la lección versaría sobre la creación de los parques naturales españoles (el 1º fue el de Covadonga en 1918) y la orografía de los picos de Europa. Y también explicaba la organización, coches y profes de apoyo, la educación vial, mantenimiento de la bici, etc. Bueno más o menos así quedó zanjado el tema, pero con signos de interrogación en mi cabeza de qué pasaría. Unos días después al salir las notas, estaba acojonado, y me quedé sorprendido y muy contento, seguía en el número uno de la lista, fue otro de mis grandes momentos en la vida, había solucionado el modus vivendi, el trabajo y más o menos el futuro con una plaza de lo mío, de profe de EF, y además como primero de la lista el Ies Mata Jove de la Calzada era mío, volvía a mis orígenes, pero no de atuendo deportivo a clase de gimnasia a correr la ruta de los elefantes con Bericua, sino de chandall pero de profe dirigiendo a mis alumnos ¡¡vaya gozada!!
Otros de los momentos más agradables de mi vida profesional fue cuando saqué la cátedra de EF en secundaria 1997, y cuando defendí mi tesis doctoral 2000, amen de la presentación de algunos de mis libros, y también cuando me concedieron el honor de premios como el Delfos 95, el premio bolístico “Picu Peñamellera” 2000, el de investigación Foro Jovellanos 2002 o la candidatura al Príncipe de Asturias 93.

En estos años de docencia, he tenido múltiples y maravillosas experiencias, y también alguna mala, que no merece la pena recordar. Comencé trabajando en el Servicio de Educación Física de la Universidad de Oviedo, y en el instituto politécnico de Avilés, donde compartí departamento con Chamorro –allí nos dieron nuestras primeras bofetadas como profes, de todo lo que habíamos estudiado rex de rex, nada de nada, había en el departamento 6 profes y una profe, nosotros cogíamos a los chicos y la profe a las chicas, la programación didáctica brillaba por su ausencia, el horario coincidía en al menos 4 profes, las instalaciones eran tres campos descubiertos de futbol sala, baloncesto y volei y un gimnasio lleno de polvo, inutilizado porque era el almacén del insti, lleno de pupitres y trastos, amen de unos potros y caballos de cuando Per Henri Ling, que no se podía usar. Y lo más gordo, era que el método didáctico instituido en el centro, una especie de “enseñanza mediante la búsqueda” era que el primer grupo que llegaba al departamento cogía el balón de futbol y ocupaba dicha cancha, el segundo el de baloncesto, el tercero el de volei, y las chicas en unos soportales con la profe, y ¡¡¡ a jugar¡¡¡, y en este escenario al principio Chamorro y yo nos mirábamos sin decir ni pío, no hacía falta palabras, los dos tan jóvenes, tan licenciados, con nuestros chandalls y pensábamos ¿Qué hacemos? Y así unos días hasta que empezamos a cambiar la dinámica poco a poco. Luego en Valliniello, donde también coincidimos. Después fui a Luces, pero no de profe de EF, sino de educador, porque aquel año alguna cabeza pensante de la dirección provincial dijo este año las plazas de EF se escogen por antigüedad no por titulación (cambiaban cada año, uno por titulación, al siguiente por antigüedad, etc, y así nos tenían divididos y vencería la administración) y entonces los recién salidos de INEF nos fuimos lejos, a mi me quedaba por escoger entre el instituto de Cangas del Narcea de profe EF o el de Agraria de Luces en Villaviciosa de educador. Y para allí fui. Aquello era <> de Palacio Valdés, aulas, residencia, comedor, huerta, semilleros, cuadra, vaques, gochos, etc., y neños y neñes del mundo rural de distintas zonas de España, y mi misión principal era que se levantasen a la hora, el desayuno en orden, que no faltaran a clase, la comida, el estudio y la noche, ¡¡vendites noches me dieron!! vaya jaleo y escándalo, la 1ª noche yo poniendo orden por los pasillos y habitaciones y ellos quitaben los plomos y me dejaben a ciegues, sin luz y ademas que no conocía el edificio, iba como en un laberinto, después ya me hice con una linterna e iba conociendo la residencia masculina. Tras la cena cerraba la residencia femenina y la masculina por aquello de que no hubiera mezclas no deseadas, y los fines de semana se me escapaben por les ventanes pa la Villa y pa Lastres, ¡¡vaya experiencia¡¡ Luego fui al instituto de Candas, el pueblu olímpicu y de los gorilas piragüistas, el insti al lado del acantilado del faro, caía un balón a la mar, y sin dame tiempu un guaje roxu y pecosu decíame tranquilu profe que lu cojo yo, quitaba el chandal y al agua en plenu invierno, y yo acojonau, decía no hacer esto nunca mas, el agua ta muy fría, tais acaloraos y va davos algo, y un balón no val la pena, no sabía como hacerlos desistir; Más tarde el Ies nº1 de Gijón, donde casi todo el alumnado eran chicas, peluqueras, costureras, cocineras, bueno allí me cortaban el pelo, me cosían el chandall, y comía muchas veces de cine. Y ya con les oposiciones, por fin el Mata Jove, donde permanecí 18 años muy buenos enseñando a guajes de mi barrio, que yo llamaba en plan de broma “matajóvenes”, porque eran la [no digas tacos]. Además de enseñar EF, fui un socializador, una especie de asistente social. Tengo muchas anécdotas, por ejemplo forme un grupo de montaña, y salíamos los fines de semana con tiendas de campaña y todo, un día en el valle de lago de Somiedo, ya entrada la noche, siento un gran revuelu, salgo de la tienda y veo en un cercao un guaje toreando un toro, tuve de matalu, explicandoi como lu iba yo a evacuar si le daba un cornazu. Otro día en el viaje de estudios, estábamos en un hotel para estudiantes de Munich, y un guaje de fontanería, intentaba ligar una rubia germana de un colegio de Hamburgo, entonces llego el mozu de la chavala, un prusiano roxu y grandón y discutieron no se en que idioma, y el fonta remangoi tal [no digas tacos] con una anillo de esos gordos que le hizo un furacu en el pómulo, el alemán fue con su profe al hospital y a la policía, pero fueron razonables ya que se dieron por satisfechos con que el fonta y yo nos disculpáramos públicamente ¡¡pardon monsieur le professeur et eleve, excusemoi si vous plait!! Exclamaba mi alumno en un francés con acento de la Calzada, a la vez que le daba 10 marcos para el taxi al hospital y a la policía, y así no nos denunciaron. Otra vez fuimos de excursión a León, y después de ver San Marcos, un alumno esgalitó por el mástil de una bandera institucional y la cogió, era la de Castilla León, cuando ya veníamos de vuelta oímos la sirena de la policía municipal que paró el autobús y nos cuenta que un chaval iba ondeando la bandera por la ventanilla. Y así un montón más, como casi todos en nuestra vida docente, porque el que con guajes se acuesta….mesiau se levanta.


Simultáneamente a la docencia, a casi todos nos gustaba el entrenamiento y los deportes, por tanto desarrollamos a la vez esta faceta en clubes, remunerada o no. Así ejercí en el Patronato deportivo municipal de Gijón, en el Grupo Covadonga, en varios gimnasios, en el Esmena de volei, y en la Escuela de futbol de Mareo en los últimos 15 años, pasando por todas las categorías, hasta llegar a los últimos 6 años en el 1º equipo a nivel profesional, que es un trabajo muy guapo, muy distinto al resto, que te llena mucho, y te sientes realizado, y en el que tuve otra de las grandes satisfacciones de mi vida en este caso deportiva, colaborar con mi equipo y cuadro técnico al ascenso del Sporting a 1ª División en 2008, fue una gesta casi heróica, y una alegría indescriptible para toda la ciudad que nunca podré olvidar.

En los primeros años de trabajo me tuvo que prestar dinero mi padre para comprarme un coche de 3ª o 4ª mano, un Renault 5 amarillo que casi lo tenía que empujar, pero es que al principio todos los inefos eramos pluriempleados, no por egoísmo, sino porque ganábamos muy poco, una miseria, en cualquiera de las actividades que desarrollábamos fuese enseñanza o deportiva. Era la monda, yo llegué a ir en el coche vestido de kimono para no perder tiempo, y vaya corte al salir en el aparcamiento en eses traces, pero es que trabajaba en el mismo día en Oviedo, Avilés y Gijón en un par de gimnasios dando clases de judo. Y así estaban todas y todos los compañeros. En el insti dabas las mismas horas que los demás y cobrabas la mitad o menos, creo que el primer sueldo que cobre eran 24000 pts/145E/al mes y porque tenía la tesina y era profesor titular. Y claro no se podía vivir. Pero todos nosotros, trabajábamos con ilusión, con ganas, queríamos cambiar aquella “maría” desprestigiada por una asignatura como las demás, y en los claustros y con la dirección venga a explicar que necesitamos espacios cubiertos, y material, que no se llamaba gimnasia sino EF, etc, etc,. Fueron muchos años los que se tardaron en reconocer y en dignificar nuestra área. Incluso algún director de instituto cuando hablada en el claustro decía por ejemplo: en este instituto somos 60 profesores, 2 de gimnasia, 1 de hogar y 1 de religión y quedaba tan anchu y tan panchu. Fuimos un personal vario sin clasificar, y sin embargo éramos los únicos que en nuestro currículo de la carrera estudiábamos para enseñar, pedagogía, psicología, sociología, didáctica, practicum, etc. Y claro teníes que explicailo a todo dios, al jefe estudios porque igual te metia 3 cursos en un gimnasio de 90m2 a la vez, o si algún profe tenia la brillante osadía de mandar su clase al patio a jugar un partidin, había que decirle claramente, que cuidado que el patio es mi aula, el aula de EF y tengo clase campeón, o imagínate que yo lleve a los chavales a tu aula a leer unos librinos de lo que sea, ¿qué diries tu?. Y ademas los horarios estaban hechos por jerarquías, primero para los cátedros y agregados de las áreas histórica y académicamente más poderosas como mate, lengua, historia, etc. y los huequinos que quedaban para la gimnasia, sin importar ningún criterio pedagógico. Y así fueron años y paños en unas condiciones lamentables que pudimos dejar atrás gracias a la labor y profesionalidad que demostró todo este colectivo, a base de trabajo diario, con frío, viento, y lluvia, sin vestuarios, ni duchas, sin equipamientos, etc.


Por todo ello, y ahora me dirijo a las nuevas generaciones, os pediría humildemente que cuando os toque un compañero/a que peine canas, tengáis respeto y admiración, tengáis siempre presente esta historia, y la lucha que tuvo que ofrecer para dignificar tanto los estudios como la asignatura que recibisteis en los últimos años, y que toméis el relevo con fuerza pues aún no está todo hecho, debemos seguir mejorando. Y el Colef es la casa común, la plataforma, el nexo de unión para que la profesionalidad de la EF sea aún más reconocida socialmente y más prestigiada en el futuro.

Por eso este premio no es sólo para mi, todos tenéis una parte de el, todos pusisteis vuestro granito de arena en la dignificación y el reconocimiento social de esta profesión, cada cual en su momento histórico y en su contexto, y creo sin duda que todos lo merecéis, pero claro esto de los premios ye así, hay que dailu a alguien y esta vez recayó en mi, y con mucho orgullo y honor vengo a recogerlo.

Es maravilloso trabajar en lo que a uno le gusta, es de lo mejor por lo que puedes luchar en la vida, yo soy un elegido en este aspecto y le doy gracias a Dios, siempre EF, deporte y futbol. Que más se puede pedir para ser feliz. Gracies por este premio del colectivo de profesores de EF que forman el COLEF, es un reconocimiento que me honra y me llena de orgullo y satisfacción, pero lo verdaderamente honroso y orgulloso es haber estudiado, y trabajado como enseñante de EF, de haber vivido esta profesión, seguro que si volviera a nacer haría otra vez lo mismo.

He sido un poco palizas, lo sé y os pido perdón, ya sólo me resta decir, haciendo un símil de lo escrito por Alejandro Casona en la pieza teatral , en la que, uno de los personajes le decía al mayoral en su lecho de muerte: “has sido un gran hombre, has hecho tierra de siembra lo que era monte, has criado 9 hijos y en cincuenta leguas nadie ha jugado a los bolos como tu”; y yo me digo a mi mismo: “tuviste 2 maravillosos hijos, una gran mujer, plantaste más de un árbol, escribiste varios libros, pareces un buen paisano, trabajaste en lo que más te gustaba, fuiste un buen hijo, un amigo fiel, y desde hoy yes el 1º Premio COLEF”, Gerardín ¿qué más puedes pedir en esta vida? puedes morrer tranquilu.

Muchas gracias y recibid un cariñoso y deportivo abrazu a todos de vuestro amigo y profesor de EF Gerardo Ruiz

Y a continuación, como prueba de lo que conté sobre la lucha por la EF, me quito la chaqueta, saco la corbata, me deshago de la camisa, y quedo en una camiseta azul de 1977 (33 años) que tenía serigrafiado en el pecho y en la espalda: “QUEREMOS UNA FACULTAD DE EDUCACIÓN FÍSICA”

Glorioso!!
Para la historia!!
Menuda inyección de orgullo, autoestima y demás para todos.

Así acabó el auditorio tras el discurso:

Qué decir que no hayáis oído ya en este foro o en boca de otros los que no tuvisteis la suerte de asistir...
Para mi fue un discurso, alentador, motivador y que resume el sentir de nuestra profesión, ya que al fin y al cabo, Gerardo es parte ya de la historia de nuestra profesión.
Existe también un documento gráfico en video, pero que hay que editar un poco antes de que se pueda ver y eso lleva bastante tiempo así que un poquito de paciencia. Cuando esté disponible y previo permiso del protagonista nuevamente podréis verlo.

Un saludo a todos!!!

Impresionante y emocionante.

Me quito el sombrero.

Krlos.

Fue todo un placer escucharlo en directo y no poder reprimir mas de una carcajada durante su ameno discurso.

La verdad es que no podría estar más de acuerdo. GENIAL, tanto el discurso, como el resto de las actividades de la jornada. Gracias a todos los que habéis trabajado duro en el evento y os habéis encargado de amenizarla. (A tí también, Jlumor! )